Flotaban orgasmos bajo el sol ~

Hoy voy a escribir porque esta mañana me levanté asustada (y a mí nunca me gusto tener miedo, prefiero estar acongojada).
La historia va mas-o-menos así:
En mi sueño pasaban una serie de cosas terribles, malas noticias, traiciones, problemas económicos, y demás adebacles que me hacían TEMERLE a la vida. Y en vez de transformarme en una verdadera luchadora, quería huir porque me sentía débil. Cómo una gran cobarde. 
Y la verdad es que titubeé, cuándo amanecí, titubeé, porque estaba realmente aturdida. Tuve que empezar a replantearme todo aquello que creía inexorable (Incluyendo mis miedos). Es decir, siempre supe que no le temo al precipicio, ni a quedarme sola, ni a los fantasmas, ni a la muerte. Tampoco me asusta el silencio, la oscuridad, la vejez, la osadía... O LA LOCURA. 
Lo que verdaderamente me hizo entrar en pánico fue que en mi sueño vi una cara de mí que siempre intente ocultar. Soy valiente, tengo todo lo suficientemente en su lugar cómo para bancarme la hecatombe que se venga, y sin embargo en mi sueño quería correr en vez de seguir volando.
Y temí. Temí, algún día, no atreverme a buscar (aunque sea en el lugar equivocado) el pedacito que siempre falta para ser feliz. 
O aún peor, ahogarme cuándo mi balsa haga agua por todos lados, sin haber llegado a ver el verdadero ocaso.